La energía agrovoltaica, que maximiza la sinergia entre la energía fotovoltaica y la agricultura mediante la instalación de paneles solares en suelo agrícola, se posiciona como uno de los referentes de la sostenibilidad en un sector que busca dar respuesta eficaz a los problemas de la sociedad actual.¡Aprende más aquí!La desnutrición y el hambre son problemas expuestos por el presidente de la Asamblea General de la ONU, Abdulla Shahid, que siguen sin resolver y para los que es necesario encontrar respuestas urgentes.De esta manera, es fundamental aumentar la resiliencia de los sistemas alimentarios en todo el mundo.Y si la solución está en el uso de energías renovables y agricultura sostenible, ¿por qué no se pueden combinar ambas?Su combinación se puede realizar mediante energía agrovoltaica.La energía agrovoltaica es la producción de electricidad a partir de paneles solares instalados en terrenos agrícolas o de pastos, que permiten la producción de alimentos y energía al mismo tiempo.Si bien la sombra de los paneles colocados en los campos puede afectar la productividad agrícola, ya que las plantaciones reciben menos luz, cabe señalar que esto podría beneficiar algunas producciones, según estudios más recientes.Independientemente de estas cuestiones, los resultados de la implementación de sistemas agrovoltaicos han sido positivos.En un estudio publicado recientemente por Nature, señala que si solo se dedicara el 1% de la tierra productiva a la producción de energía agrovoltaica, sería posible compensar la demanda energética a nivel mundial.Tales prácticas también pueden aumentar la eficiencia del uso de la tierra, ya que permiten que los paneles solares y la agricultura compartan espacio, en lugar de hacerlos competir entre sí.Los paneles solares se pueden ajustar (elevados o suspendidos), contribuyendo al crecimiento de las plantas debajo.Pero se han ideado muchas otras técnicas y formas de ajustar estos paneles y la producción.De hecho, existen muchas otras soluciones basadas en el uso de la inteligencia artificial, el Big Data y el Internet de las Cosas.Con estos recursos se han mejorado muchos de estos sistemas agrovoltaicos, contribuyendo a una agricultura más inteligente.Algunas de estas instalaciones utilizan sistemas de monitorización, que permiten orientar los paneles solares para maximizar la eficiencia energética y evitar que las sombras se produzcan siempre en el mismo lugar.Además de utilizar modelos de software más sofisticados y complejos, consideran las etapas de crecimiento de los cultivos y el clima, adaptándose fácilmente a las necesidades específicas de cada tipo de plantación.A medio y largo plazo, los paneles solares también comenzarán a utilizar polímeros semitransparentes que contribuirán al paso de la longitud de onda de la luz solar necesaria para la fotosíntesis y la absorción de la luz restante para crear energía.Investigadores de la Universidad Nacional de Chonnam, en Corea del Sur, mostraron los resultados de producir brócoli con paneles fotovoltaicos en un estudio publicado en la revista Agronomy.En este caso colocaron las estructuras a 2-3 metros del suelo y en un ángulo de 30º, dando sombra y protegiendo los cultivos de la intemperie.Lo que demuestra el estudio es que la calidad del brócoli no es inferior a la de producción tradicional y que el sabor en sí no muestra cambios significativos.Por cierto, el color de producción tiene un tono más verde, haciéndolo más atractivo para el consumidor final.En otros lugares del mundo ya existen ejemplos de proyectos piloto de energía agrovoltaica.Por ejemplo, en Europa existen sitios de prueba para la generación de energía eléctrica y la producción agrícola en Alemania, Francia, Reino Unido, España o Italia.Por cierto, en Francia se está ejecutando un proyecto piloto, con más de 5000 paneles solares colocados en Amance, en el noreste del país, y donde se espera poder producir 2,5 megavatios de energía en horas punta, según lo que se informó en Euronews. .En África Oriental también están permitiendo a los agricultores mejorar el uso de la tierra.En Kenia, se puso en marcha un proyecto de agricultura agrovoltaica, utilizando paneles solares colocados a varios metros sobre el suelo.Las sombras creadas permitirán la protección contra el estrés térmico y una mejor gestión de la pérdida de agua.Este doble uso del suelo tiene numerosas ventajas que conviene destacar.Por un lado, contribuye a aliviar la presión sobre los ecosistemas y la biodiversidad, que normalmente son los más afectados por la expansión de las superficies cultivadas.Por otro lado, los proyectos de energía agrovoltaica pueden apoyar el desarrollo económico de las zonas rurales, aumentando la oferta de puestos de trabajo y contribuyendo a mejorar la calidad de vida de la población local.Mito: "Colocar #solar en la tierra la inutiliza para cualquier otro propósito" Realidad: "Los paneles solares pueden convivir con la biodiversidad del área. La energía #agrovoltaica es el ejemplo perfecto de ello. Consiste en usar el área de la tierra para tanto la #energíasolar como los productos agrícolas".pic.twitter.com/y9CVqKXDjOAlgunos estudios demuestran que la electricidad generada por paneles solares mejora el valor económico de los terrenos agrícolas donde se instalan en más de un 30%.Esto es particularmente relevante en áreas con temperaturas más altas, donde la sombra puede proteger los cultivos al bajar la temperatura y evitar la evaporación excesiva.© 2023 Meteorito.Todos los derechos reservados